Querido Luis:
Adjunto te envio nueva entrega ,en esta ocasion Fotos de Pozuelo.
En la primera foto estamos un grupillo y subido en el mulo creo, es el ¿ Hno Jorge.?
En la segunda foto compañeros de clase.
En la tercera foto, dándonos una comilona campestre ya que la mayoria comiamos de fiambrera y bocata.
En la cuarta foto, unos compañeros de clase y la porteria de futbol donde tanto jugábamos.
En esta quinta foto aparece un hermano pero no se como se llamaba (A ver si alguien lo sabe y le ponemos nombre.)
Y en esta ultima foto el famoso torreón que creo, nos servia a todos de referencia para orientarnos, seguro que lo recordáis.
Aun me queda alguna foto mas que enviarte,
Un abrazo
Javier Ruano
Javier: Creo que vas a ganar el concurso del museo de este blog que Luis sigue lanzando con vuestras colaboraciones. El hermano de la sotana es el hno Ambrosio que falleció hace 20 años en Rentería. Su nombre de pila era Marcelino Martínez de Antoñana.
ResponderEliminarEl que está subido en el mulo bien puede ser el hermano Jorge. Hoy está de administrador en la Casa General
Bernardo, me quieres explicar, como tienes tanta informacion y reconoces a tanta gente, despues de
ResponderEliminartantos años transcurridos.
Javier:La memoria. No me ha llegado el Alzheimer todavía.Se me quedan las caras fácilmente.Sigue metiendo fotos que son de las mejores que hemos visto sobre Pozuelo.
ResponderEliminarMilagro....de Internet, del blog, de... Corresponsal en ROMA. Escribe el hermano Jorge
ResponderEliminarHola, Bernardo:soy el hermano Ángal Ibarzábal desde Roma(Bien dice Javier Ruano, el hermano Jorge).Efectivamente. Era yo cuando estaba en Claudio Coello e íbamos todos los jueves de primavera y otoño a Pozuelo. De eso han pasado ya 46 años. ¡Cómo pasa el tiempo!Esa foto la sacó el Hermano Fernando Deltour
Por supuesto que se refiere en el comentario anterior a la foto del mulo. El hermano jorge ratifica que es él el que está montado en el mulo.
ResponderEliminarHola. Qué nivel. Un poco pequeño era yo para escaparme de la cuna e ir al Cole ya. Pero esto está entretenido. Lo que pasa es que no puedo aportar nada....observar y leer.
ResponderEliminarUn saludo,
En la primera foto (la de la mula con el hermano Jorge) reconozco las caras de todos, pero sólo recuerdo los nombres de algunos: el primero de la izquierda, apoyado en otro con jersey a rayas, es uno de los gemelos López Diéguez (Rafael o Marcial). El cuarto de la izquierda, con la cabeza vuelta hacia la derecha de la foto y delante del árbol, es Nicomedes Fernández. A la derecha del de jersey a rayas aparece sentado José Antonio Aranda Camarero. Más a la derecha, sentado, con flequillo y corbata, García Pacheco. A su izquierda, con la cara medio oculta, me parece reconocer a López Viejo. El último de la derecha, en cuclillas y con una ramita en la mano izquierda, es De Garay.
ResponderEliminarDesde luego, el hermano con sotana de la quinta foto es el hermano Marcelino. Nos daba francés y alguna otra asignatura. Recuerdo que cuando conjugaba los verbos con su pronunciación carpetovetónica (yoré, ti orás, il orá...) al pobre se le soltaba la dentadura postiza y se aturrullaba, con la rechifla general...
Saludos a todos
Julio Vías
Hola,
ResponderEliminarPues yo recordaba muy bien al Hermano Marcelino, bajito, que creo que tenía su dormitorio detrás de una de las clases, en el piso bajo, al fondo del colegio.
Me caía bien, no sé por qué.
Un abrazo.
Fernando Lozano
Hola,
ResponderEliminarPues yo recordaba muy bien al Hermano Marcelino, bajito, que creo que tenía su dormitorio detrás de una de las clases, en el piso bajo, al fondo del colegio.
Me caía bien, no sé por qué.
Un abrazo.
Fernando Lozano
Sí, el hermano Marcelino parecía buena persona. Bajito y con cierto aire ausente y melancólico, entre clase y clase se recluía en su pequeño cuartucho, situado junto a los urinarios, para tomarse un respiro y fumarse un pitillo con tranquilidad, lejos del bullicio de la marabunta. Recuerdo que cuando ya no podía más con nosotros, viendo la inutilidad de sus amenazas para imponer el orden, plegaba velas y nos decía con su acento vasco: Ale pués, rían, rían, que ya llorarán...
ResponderEliminarIncluso cuando se veía en la necesidad de repartir algo de leña entre los elementos más levantiscos parecía que lo hacía sin demasiada convicción, casi como si temiera que pensáramos que no era capaz.
Me ha dado pena al ver su foto después de tantos años y saber de su muerte, aunque por la edad que tenía estaba claro que tenía que haber fallecido hace mucho tiempo.
Julio
A mí me parece que confundís al hermano Ambrosio, que es el que está en la foto y se llamaba de pila Marcelino, con el hermano Marcelino de aire ausente y melancólico que dice Julio y que después estuvo en Alfonso XIII.
ResponderEliminarSí, no hay duda de que se trata del hermano Marcelino solo que en la última época estaba más gordito y también un poco más calvo (como todos nosostros, creo). Yo tengo un especial grato recuerdo de él. Efectivamente dormía en una habitación que estaba adosada en el aula de abajo, junto a los urinarios y recuerdo que cuando nos asomábamos por la cerradura siempre había allí, sobre la mesa, una manzabna a medio comer
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